En el Día Mundial de la Ambliopía, que se conmemora cada 15 de octubre, el Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja realizó una Campaña de despistaje de ampliopía u ‘ojo perezoso’ en niños, promoviendo la detección y tratamiento oportuno de estos casos para evitar complicaciones a futuro que puedan limitar su visión y afectar su desarrollo y aprendizaje.
La jornada fue gratuita y abierta para niños de todo el país, especialmente menores entre 4 y 14 años de edad, quienes fueron atendidos por médicos y especialistas disfrazados de ‘piratas vengadores’ en stands acondicionados en el Auditorio Institucional. Nuestra Directora General Dra. Zulema Tomas también se hizo presente en la campaña, expresando el apoyo de su gestión a estas iniciativas y felicitando al equipo del Servicio de Oftalmología por su compromiso con la prevención y cuidado visual en la población infantil.
Bajo esta divertida temática, los especialistas del servicio de Oftalmología realizaron una serie de test y pruebas especializadas a los niños que asistieron para detectar diversas ametropías (astigmatismo, hipermetropía, anisometrías, ambliopías, miopía, estrabismo). También hubo activaciones orientadas a sensibilizar y promover en los padres de familia la prevención e importancia de detectar en forma oportuna problemas visuales como la ambliopía, que deben ser tratados durante la niñez.
El Dr. Jesús Malpartida, oftalmólogo pediatra, señaló que la Ampliopía es cuando el niño tiene una visión limitada, puede ser en uno o los dos ojos. Explicó que después de los ocho años de edad el tratamiento de este mal es poco eficaz y el adulto con ojo perezoso quedará con visión monocular, lo que ocasiona limitación de su campo visual y un mayor riesgo de ceguera. “Muchos pacientes son asintomáticos, por lo que el diagnóstico es tardío.”, puntualizó.
El INSN San Borja como instituto especializado-quirúrgico promueve la detección precoz de problemas de visión en niños, identificando casos de menores con diagnóstico de ambliopía u ojo perezoso entre otros problemas oftalmológicos complejos que requieren operación como parálisis, estrabismo y retinopatía del prematuro. “En el INSNSB atendemos a unos 2 mil menores al año en el servicio de oftalmología, el 30% presentan problemas refractivos y un 10% presentan ojo perezoso”, indicó.
Algunos signos que podrían ayudar a sospechar de esta patología son: desviación ocular o también llamado estrabismo (por la falta de fijación de uno a ambos ojos, que al perder visión se vuelve vago), dolor de cabeza, lagrimeo, ojo rojo, irritación o molestia al cubrir un ojo, y a veces mareados o picazón en los ojos cuando lee desde lejos. “Es un problema que se puede prevenir haciendo una evaluación oftalmológica a nuestros niños y estando alerta de estos signos”, expresó el especialista.


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