INSNSB REALIZA PRIMERA CIRUGÍA DE RECONSTRUCCIÓN FACIAL A ADOLESCENTE QUE PRESENTABA 22 FRACTURAS EN EL ROSTRO VICTIMA DE LA DELINCUENCIA

Un joven de 16 años con múltiples fracturas en la cara fue sometido a una Cirugía de Reconstrucción Facial, que se realizó por primera vez en el Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja, demostrando su especialidad en el manejo de casos quirúrgicos complejos a nivel pediátrico.
El paciente de iniciales D.C.I. ingresó al Instituto el pasado 13 de junio derivado del Hospital La Caleta de Chimbote, a donde fue llevado tras sufrir una fuerte agresión para robarle su celular, que le dejó más de 22 fracturas en el rostro, lo que clínicamente se conoce como fractura panfacial porque comprende fracturas a nivel del tercio superior, tercio medio y tercio inferior de la cara.
La intervención se llevó a cabo el pasado 29 de junio a cargo de un equipo de cirujanos de Cabeza y Cuello y Maxilofacial, y de otorrinolaringología, dirigido por el Dr. Alfredo Broggi Ángulo, que durante más de cinco horas realizaron un trabajo minucioso reduciendo las fracturas con placas, mallas y tornillos de titanio. La cirugía se realizó sin hacerle ningún corte en el rostro, operando por la boca (vía intraoral).
Debido a la cantidad de fracturas, los cirujanos especialistas realizaron previo a la cirugía el planeamiento quirúrgico virtual con impresión 3D, utilizando un biomodelo del cráneo del paciente en tamaño real, que ayudó para moldear las placas y colocación de tornillos y mallas que se usaron en la cirugía. El Dr. Alfredo Broggi, cirujano de Cabeza y Cuello y Maxilofacial explicó que se trata de una cirugía compleja, que se realiza por primera vez en el INSNSB ya que no es muy común ver lesiones de ese tipo, con múltiples fracturas en cara en pacientes pediátricos.
La agresión que sufrió el adolescente fue tan fuerte, que en un inicio fue atendido en la Unidad de Cuidados Intensivos de Neurocirugía debido a que también presentaba traumatismo encefalocraneano con hemorragia intracerebral, que finalmente se logró estabilizar. Además, fue tratado por médicos oftalmólogos para evitar que las lesiones lleguen afectar su visión.
Tras el éxito de la cirugía, que fue enteramente financiada por el Seguro Integral de Salud, el joven se encuentra recuperándose favorablemente en el área de hospitalización de Especialidades Quirúrgicas, acompañado de su humilde madre Gumercinda Islado Valerio, quien está muy agradecida con los médicos que operaron a su hijo porque su temor era que quede desfigurado o pierda la vista.
El joven natural de Ancash es el último de cinco hermanos, y desde hace dos años vivía junto a su madre en el pueblo de Nueva Esperanza en Chimbote, donde fue víctima de la delincuencia.